Tengo vertigo, todo va muy rápido ultimamente. Tengo la sensación de que si me paro ya no podré recuperar el ritmo, y a la vez, siento que cuanto más rápido voy, menos ansiedad tengo. Creo que Dios nos gastó una gran broma poniendonos aquí pues todo está lleno de contradicciones y misterios. El secreto (a voces) es como te lo tomes. Si te quieres enfadar, estupendo. Si te quieres reir, mejor. La vida es extrañamente maravillosa. ¿En qué estaría yo pensando?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario